jueves, 15 de agosto de 2013

La Catedral de Chester.




Chester es una  ciudad inglesa preciosa, muy turística y muy medieval, situada al sur de Liverpool y casi ya en Gales. Tiene las murallas mejor conservadas de Inglaterra y también un paseo encima de ellas de varios kilómetros desde donde se domina toda la ciudad y permite una agradable visita.

 En las murallas también se encuentra el famoso reloj de Eastgate de 1897 que se hizo para el jubileo de la Reina Victoria. La gente es muy amable pues está acostumbrada a los turistas tanto británicos como extranjeros. Desde Liverpool es casi una visita obligada ya que es muy accesible con el tren de cercanías, es rápido y con muy buenos horarios. Chester cuenta con un yacimiento romano perfectamente estudiado y contaba con una guarnición legionaria de primer orden.




A Avekrénides le gustó mucho la catedral de Chester. Es una catedral anglicana excelentemente conservada, de visita gratuita y con una muy buena tienda de souvenirs. Es fácil de localizar pues queda enfrente del Ayuntamiento.

Localización de la Catedral de Chester.



                                                         Plano de la Catedral de Chester

Es un edificio gótico, de hermosas vidrieras datado en el 1250, pero sus orígenes se remontan a un templo romano que ya existía aquí, un templo normando e incluso fue una abadía benedictina.
Es un edificio más bien oscuro y silencioso, nada más entrar hay que fijarse sobre todo en el techo de la nave central, impresionante entramado de arcos góticos. Todo el interior está ricamente decorado y además cuenta con numerosas tumbas de hombres ilustres y héroes de las guerras en las que intervino Gran Bretaña.












Destaca también la zona del Coro gótico, además Avekrénides tuvo la suerte de comprobar la sonoridad de la catedral pues estaba ensayando una coral femenina que actuaba después y le daba un aire todavía más místico y religioso a la visita.







Pero si hay un lugar tranquilo y especialmente bello en la Catedral de Chester es sin duda su Claustro. Se puede deambular sin problemas a su alrededor y salir al patio, sentarse en un banco y escuchar tranquilamente el silencio. En medio hay una impresionante estatua-fuente de una pareja, sorprendente en una catedral desde luego en España no se ve una cosa así.






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